Desengrasante de secado rápido, sin tensioactivos.

Limpieza y eliminación rápida y fácil de materiales y residuos adheridos al sistema de frenos.
 
No es necesario desmontar el sistema de frenos.

Elimina los ruidos y la humedad.

Aumenta la eficacia del sistema de frenado.

Reduce los costes de mantenimiento.

EQ-BRAKE es un excelente desengrasante y limpiador de discos de freno, que basa su efectividad en una selección de disolventes de evaporación rápida y excelente fuerza de limpieza de residuos, aceites y grasas. No contiene tensioactivos, los cuales interferirían en el secado y podrían dejar residuos adheridos.

• Elimina de forma rápida y fácil los materiales que se adhieran al sistema de frenos.
• Limpia y elimina rápidamente líquido de frenos, asbestos, residuos de corrosión, grasas, aceites, partículas de metal, y demás impurezas, sin necesidad de desmontarlo.
• Secado rápido.
• Elimina ruidos y la humedad de los frenos de disco y de los tambores.
• Aumenta la eficacia del sistema de frenado.
• Reduce los costes de mantenimiento.

Elimina todo tipo de aceites y grasas sin tener que desmontar la unidad del freno. Es una manera rápida y eficiente de limpiar todas las partes de los frenos, tanto de disco como de tambor.

Limpia y desengrasa forros, tambores, discos, cilindros, muelles, etc. No deja residuos, ni olores desagradables al evaporar.

Desengrasado de superficies no pintadas, ya sean metálicas, a base de cemento, ladrillos, o superficies de soporte mineral.

EQ-BRAKE puede ser utilizado en tálleres de reparación y servicios de mantenimiento, gracias a su excepcional poder desengrasante. Muy recomendado para talleres de reparación rápida.

Retirar la llanta. Aplicar EQ-BRAKE en el disco de freno y en las pastillas de forma abundante, hasta que las impurezas empiecen a deslizarse. Secar y retirar el posible exceso de producto. Esta operación se repetirá hasta que las superficies estén completamente limpias de polvo.

Realizar esta operación cada dos meses.

Como desengrasante de superficies y piezas metálicas, superficies a base de cemento, ladrillos, etc., se aplicará dirigiendo el aerosol hacía la suciedad a eliminar, procediendo a retirar los residuos con un trapo o con aire comprimido.

Se debe tener precaución con superficies pintadas y superficies de plástico, u otros materiales sensibles a la acción de disolventes.